Varias veces en mi instagram (@ayurverde) me han preguntado si soy vegetariana, crudívora, vegana...etc. Y la respuesta es la misma, no etiqueto mi alimentación, no me gusta ponerle un nombre, pero si tuviese que hacerlo diría que es una alimentación consciente.
Cuando comencé a hacer los cambios en mi rutina, me di cuenta que al empezar a cocinarme, a revisar qué me hacía bien y qué mal, se fue volviendo un proceso de autoconocimiento y toma de conciencia de mi cuerpo, de mis necesidades y de mis deseos.
No me gustan las dietas o reglas rígidas que te hacen estresar por tratar de seguir un modelo ideal, por eso mismo cuando me preguntan qué debo comer o cuánto, digo que depende de uno. Somos seres individuales y singulares y esa particularidad es hermosa, creo que es un error tratar de eliminarla!
Comienza a escuchar tu cuerpo, conocerlo, tratarlo con cariño, y estarás en el camino correcto.
Pero para esto es importante aprender, explorar, y tomar conciencia de lo que compramos, a quién se lo compramos, y lo que decidimos poner en nuestro cuerpo, son decisiones importantes, de las más importantes que tomamos en nuestra vida. En nuestro cuerpo habita nuestro ser!
Y es por esto que yo como lo que me dan ganas de comer. Ocurre que al comenzar a aprender hubo cosas que nunca más me dieron ganas de tomar o comer, y hace dos años que no las consumo y ni las extraño!! Hay cosas que me dieron ganas de disminuir, y que fuesen excepciones al mes y otras excepciones a la semana, y hubo cosas que aumenté considerablemente su consumo.... Así llegue a la manera que tengo hoy.
Espero poder ayudarlos para que cada uno encuentre su propia manera de cuidarse y pueda decidir qué pone en su cuerpo, tal y como decidiría lo que se pone en su cara para salir a pasear!
Se trata de un balance, luego del caos y el desorden, saber restaurar, ordenar y purificar! y todo el tiempo ir viajando entre ambos polos!.... Así es como un sábado en la
noche me tomo una cervecita artesanal, y al día siguiente no olvido mis batidos verdes! Jejeje por qué no?
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